Gracias al nuevo contrato en Latinoamérica, su actividad fuera de las fronteras españolas suma el 97% del total de la facturación.
La empresa gijonesa TSK tiene más de 30 años de experiencia en el sector industrial y energético. Constituida como sociedad en el año 1986, fue la primera empresa de ingeniería que cotizó en la bolsa española, tal y como afirma en su web.
La apuesta por la internacionalización que ha seguido TSK en los últimos 5 años ha dado sus frutos y ya está presente en numerosos proyectos de 35 países en todo el mundo. En el 2011, el 71% de su facturación fue gracias a su presencia en mercados internacionales y el 29% restante vino de su actividad en España. En el año 2012, el peso internacional aumentó hasta el 85% de su facturación llegando a su máxima cifra en el último ejercicio 2015, consiguiendo que el 97% del total de su actividad proviniese del mercado internacional.
Esta expansión internacional ha llevado a la empresa a aumentar exponencialmente su cifra de negocio, que en 2011 era de 348 millones, y que a estas alturas de año se sitúa en más de 700 millones de euros gracias a los contratos en los mercados de Oriente Próximo, África y Latinoamérica. Estos datos del actual ejercicio económico suponen rozar la cifra total del ejercicio de 2015 que fue de 740 millones.
El crecimiento de TSK lleva implícito un aumento de la plantilla de la empresa. Durante este lustro de expansión en mercados extranjeros, el personal de la compañía ha pasado de ser de 735 empleados en 2011 a 890 personas para el pasado 2015. Y dado los buenos datos en cuanto a cifra de negocio que está llevando en este año 2016, se espera que la plantilla siga en constante crecimiento.
De los 890 empleados en 2015, el 75% son ingenieros y gestión de proyectos; el 18% están dedicados al montaje y mantenimiento; un 4% corresponde a servicios corporativos; y el restante 3%, es personal de fabricación de cuadros eléctricos.
Nuevo consorcio con Siemens en Bolivia
La empresa asturiana acaba de hacerse con el mayor proyecto de su historia en Bolivia. Se trata de tres contratos dentro del sector energético que se llevarán a cabo en un consorcio junto con la alemana Siemens. El proyecto supondrá una inversión de 1.050 millones de euros donde las dos empresas se lo repartirán al 50% el total.
Por tanto TSK participará en el proyecto con 500 millones de euros, y se basará la construcción de en tres ciclos combinados completos con una potencia combinada de 1.200 MW. La empresa asturiana no solo se enfrenta al mayor trabajo de su historia, sino que va a poder aumentar su presencia en el sector energético que ya supone, según sus datos, el 65% de su actividad.
TSK lleva varios años experimentando una clara expansión en el sector energético internacional. Así lo demuestra su participación en proyectos basados en la producción de energía en Dubái, Kuwait, Jordania y México, entre otros.
La asturiana TSK cuenta con más de 30 años de experiencia en el sector industrial y ha afirma ser la primera empresa de ingeniería que cotizó en la bolsa española.